La ardilla roja


La ardilla roja por Julio Medem es una película de la identidad y la mujer. La película también explora la relación entre la mujer y el hombre. La historia empieza con un accidente en la moto dónde una chica, Elisa (Sofía), se queda amnésica. Jota es la única persona que ve el accidente. Él tiene unos problemas en su mente porque tenía una relación con una novia en su banda, las Moscas. Ella ya no está con él pero él le está echando y quiere a una chica. Entonces, él decide pretender que esta chica es su novia cuando él descubrió que ella tiene amnesia. Él le llama Elisa porque es el nombre de su novia anterior. Él la sacó del hospital y ellos fueron a un lugar de camping que se llama la ardilla roja para recuperar su memoria. Aquí, Jota trata de controlar la memoria de Elisa. Ellos conocen a una familia en la ardilla roja pero Jota no quiere que Elisa hable de su pasado. Al final, nos damos cuenta de que Elisa realmente se llama Sofía y que ella tiene un marido que se llama Félix. Ella tiene miedo de Félix pero Félix está enamorado de ella. Félix trata de conseguir el amor de Elisa pero él sabe cuando ve a Elisa con Jota que no va a ser posible recuperarla, entonces él se suicida en el mar.


La sorpresa de esta película es que Elisa nunca fue amnésica solo estaba jugando con Jota. Al final, Jota y Elisa se daban cuenta de que ellos están enamorados y parecía que ellos van a quedar juntos. Esta película es muy curiosa porque pinta imágenes diferentes de la identidad, los roles de la mujer, y los roles de los hombres. Elisa sabe que Jota no es su novio pero de una manera ella asuma control de la situación además de que ella está pretendiendo que está amnésica. Ella es una mujer muy lista y parece que ella está tratando de encontrar otras partes de su identidad que no están completas. De una manera, ella muestra una mujer que es independiente e inteligente. Elisa toma control de su sexualidad y sabe cómo controlar los sentimientos del hombre. Jota piensa que él está controlando la relación pero en realidad Elisa es la persona que tiene el control. Elisa muestra muchas características de una mujer liberada. Ella es liberada sexualmente. Ella sabe lo que quiere y no tiene miedo de decirlo. Ella sabe como conducir las motos y es una campeona de natación. También, ella estudia zoología. Es una mujer que está viviendo su vida a su manera, no en la manera de lo que el hombre quiere.


La visión independiente y liberada de Elisa contrasta con la visión de la mujer en la familia de Ana y Antón. Ana y Antón son la familia que Jota y Elisa conocen en la ardilla roja. Es una familia muy tradicional y tenemos imágenes del rol tradicional de la mujer en Ana y en Cristina. Ana es la madre y parece que ella sólo limpia, cocina, y cuida a los niños. Antón es muy machista y piensa que las mujeres deben tener un lugar sumiso a los hombres. Ana ocupa este rol. Ella hace lo que su marido quiere y nunca trata de establecer su independencia como mujer. Es curioso ver que esta actitud esté reflejada en los juegos y el comportamiento de sus hijos. Cristina, la hija, siempre quiere jugar casa con su hermano. Ella es la madre y arregla la casa mientras el padre trabaja. También, vemos que el hijo no necesita ayudar en la cocina o limpiar, pero la hija sí. El hijo no le trata a su hermana o a su madre con el respeto que las mujeres merecen. Además, el hijo dice algo muy curioso de su mamá cuando está hablando de la hipnosis. Él le dice a Elisa que él quiere hacer la hipnosis a su mamá porque ella es débil. Él quiere que ella pueda limpiar la casa sin cansarse. Esta es la reflexión de la actitud de su papá y como él le trata a su esposa. Elisa rompe los esquemas de la familia y ofrece una alternativa de la vida tradicional y sumisa. La ardilla roja ofrece diferentes visiones de la mujer y la construcción de la identidad. Todos tenemos control de nuestra identidad. No tenemos que pretender que somos amnésicos para encontrarla pero es interesante ver la liberación de un comienzo nuevo.

 

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